martes, 31 de agosto de 2010

Ingrid Grudke, novia "eterna"

Ingrid trabaja en el cable y quiere volver a hacer teatro.
Modelo de reconocida trayectoria en nuestros país. Belleza sin igual, misionera y con rasgos alemanes. Su altura y elegancia la han hecho por demás distinguida en las pasarelas.
En la actualidad, protagoniza un programa en el cable y sueña con volver a hacer teatro. Ingrid Grudke, la rubia que le quita el sueño a varios, hoy para su disfrute.
-Ya tenés una trayectoria en el modelaje pero, ¿cumpliste con todos los objetivos?
-Nunca me propuse ser modelo y menos estar en el espectáculo. Todo lo hice sin saltear los pasos, me fui poniendo metas y lo logré sin ser la hija de nadie.
 

-Tampoco se te dio por los escándalos y la vida nocturna. ¿Fue realmente así?
-Sí, nunca genero esas especies de noticias. Me preocupé por no desaprovechar las oportunidades laborales como el modelaje, las campañas, el teatro y la televisión. No tuve el tiempo para otra cosa.
 

-Ahora estás en la tele, ¿te gustaría volver a hacer teatro?
-Depende de lo que me ofrezcan. El teatro tiene una magia incomparable y es la verdad absoluta. Ahí no hay engaño ni photoshop que valgan.
 

-A propósito, ¿cómo hacés para estar siempre en forma?
-Traté de estilizar mi cuerpo, en especial los músculos. Antes tenía unos brazos enormes y lo hice con cápsulas de ozono articuladas para el afinamiento.
 

-Vos parecés la novia eterna, ¿cuándo te casás?
-Soy un desastre (risas). Hace trece años que estoy de novia y tuve la oportunidad de hacerlo pero el trabajo me fue llevando a dejarlo de lado. No soy de programar las cosas pero, ¿a quien no le gustaría casarse y tener hijos? Por suerte, sigo enamorada y muy feliz.
De seguro, se la ve radiante y muy hermosa. Ya le llegará el tiempo de compartir los confites y ser madre alguna vez. Se lo merece. (Fuente revista Ahora).

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