Le llueven propuestas

De Genaro tiene un presente lleno de ofertas laborales.

Valeria De Genero es una de las bailarinas-actrices más reconocidas de hoy en día. Dueña de un físico imponente y una belleza sin igual, no pasa desapercibida en el candelero artístico, quiérase o no. Tanto que al final de este verano recibió varias ofertas laborales de países vecinos.

 

“En Abril me voy a Chile a hacer prensa y shows, ya que me va bien allá. Me quisieron hacer una canción para presentarla en Viña del Mar pero no me animé porque no me gustaba. Ahora me van a hacer otra además de un video clip para grabar en una  mansión tipo Playboy. Así que voy con ese proyecto”, contó.

 

Además, la quisieron contratar para un reality con su ex pareja Nino Dolce.”Los realities nunca me gustaron mucho pero me ofrecieron algo muy tentador. Fuimos elegidos con Nino para estar juntos en uno del canal Mega, un reality de ex parejas pero por los compromisos de uno y otro no pudimos, así que tendremos que esperar la próxima propuesta”, señaló la muchacha.

 

Con respecto a su actualidad, Valeria dijo que “vengo de hacer temporada en Colón, Entre Ríos, en la obra Cuatro colas y un funeral. Es un lugar donde no te da mucha prensa, es como una plaza paralela. No es como Carlos Paz que tenés todos los medios instalados. Ahí, como en Las Grutas, la prensa tiene que hacerla una misma”, admitió.

 

Efectivamente, Valeria no tuvo mejor idea que sacarse fotos que revolucionaron las redes sociales. “Un día estaba aburrida, empecé a sacarme selfies hot y dije ‘vamos a hacer algo para la polémica y así fue’ “(risas), se sinceró.

 

También recibió una propuesta interesante de Perú. “Si no arreglo un fijo en Chile, también me convocaron de allá y me dijeron inclusive que de rubia me iría mejor. Cuando vuelva me reuniré con mi representante a evaluar lo económico”.

 

En relación a si volvería a formar pareja con Dolce, sostuvo: “Me costó superar esa relación pero no volvería el tiempo atrás. Salí con el panelista Favio Azzaro  porque me hacía recordar a él. Nos hablamos, me pregunta por el gato (que tenían en común) y me invita a cenar. Coincidimos en un cumpleaños y se ofreció a traerme a casa. Se ve que quería otra cosa” (risas). Todo dicho. (Fuente Crónica).