Centurión, alma de potrero

Centurión volvió para ser el diez de Racing.

Lleva la diez en la espalda en este presente de La Academia. La picardía se le nota en cada jugada, su alma de potrero, su rebeldía. Tanto, que admira a Diego Maradona.

 

La similitud en los inicios por haber salido de lugares humildes, sufrientes. Ricardo Centurión es la esperanza de este Racing que quiere ocupar espacios añorados, de otros tiempos.

-Dijiste que sufriste un cambio muy grande al jugar en primera.

-Sí, porque soy del bario y de las inferiores. Uno, cuando es chico, no se imagina las cosas que eso trae. Es muy difícil tener los pies sobre la tierra. Pero estuve muy bien acompañado por mi familia. Creo no haber perdido la picardía del potrero, como Diego (Maradona), que es un grande en todo sentido. No sabés las cosas que te pueden llegar a pasar.

-Por ejemplo, los amigos del campeón…

-Como en todos lados. Hay que saber diferenciar cuando uno se equivoca y salir de ese lugar. Hay que ir aprendiendo. Hoy tengo a mi primo, dos amigos más y un montón de conocidos. Cuando te llega todo, no tuve la suerte de tener a mi padre desde muy chico. Mi vieja fue la que se puso los pantalones en mi casa.

-También mencionaste que tu paso por Italia te marcó.

-Sí, fue un año muy duro. No pude desplegar todo el bagaje futbolístico, ya que no tuve muchos minutos. Pero en lo personal, me ayudó a crecer muchísimo. Yo me fui muy chico del país y ayuda, más que nada, a las cosas de la vida.

-¿Sentís que estás protegido por tu forma de jugar en la cancha?

-Los árbitros tienen muchos vaivenes, hay que ponerse un poco en el lugar de ellos. Nosotros, a veces, somos muy dificultosos a la hora de jugar. Me gustaría estar un poco más protegido. Hay momentos en que sí les pido que me cuiden un poquito más. (Fuente Crónica).