Argentina celebra la permanencia en Primera. |
Los pronósticos no eran buenos y el panorama se había puesto muy oscuro. La
derrota en el dobles ponía en suspenso, como nunca en los últimos 13
años, la estadía de la Argentina en el Grupo Mundial de la Copa Davis. Sin
embargo, Leonardo Mayer y Carlos Berlocq, a raquetazo limpio, despejaron los
fantasmas y cosecharon una victoria que costó muchísimo.
Porque los marcadores
no deben engañar: no sobró nada. El equipo albiceleste apareció
en el último día y, con lo justo, dibujó un 3-2 ante Israel. Más que un susto,
la serie en Sunrise, Estados Unidos, fue un alivio. Ahora toca volver a empezar.
El pleito había quedado 2-1 en favor de Israel, ya que había ganado en el dobles de la mano de Jonathan Erlich y Andy Ram, que se impusieron en cinco sets a la dupla argentina conformada por Horacio Zeballos y Federico Delbonis. Pero afortunadamente, en el enfrentamiento entre las dos mejores raquetas de cada país, Mayer, 25° del ranking, tuvo una actuación sin fisuras y aplastó a Dudi Sela (84) al vencerlo en poco más de una hora y media por 6-2, 6-1 y 6-4.
El pleito había quedado 2-1 en favor de Israel, ya que había ganado en el dobles de la mano de Jonathan Erlich y Andy Ram, que se impusieron en cinco sets a la dupla argentina conformada por Horacio Zeballos y Federico Delbonis. Pero afortunadamente, en el enfrentamiento entre las dos mejores raquetas de cada país, Mayer, 25° del ranking, tuvo una actuación sin fisuras y aplastó a Dudi Sela (84) al vencerlo en poco más de una hora y media por 6-2, 6-1 y 6-4.
“No
lo dejé jugar, le exigí mucho. Por ahí arrancamos tensos en el partido, le
saqué ventaja y después jugué más relajado. Venía jugando bien y pensé en jugar
un partido más. Me salió todo, pero esto es un equipo”, dijo el Yacaré, de 27
años, que ratificó así su gran temporada, en la que ganó su primer título en
Hamburgo y logró el mejor ranking de su carrera.
Con su triunfo, Mayer forzó la disputa del quinto punto, en el que Berlocq se llevó por delante a Botzer en menos de dos horas de partido. El oriundo de Chascomús, 67° en el escalafón de la ATP, derrotó al juvenil israelí Bar Botzer (776) por 6-2, 6-3 y 6-0 y sentenció la ajustada serie en un irreversible 3-2 en favor del conjunto del ahora saliente Jaite.
Con su triunfo, Mayer forzó la disputa del quinto punto, en el que Berlocq se llevó por delante a Botzer en menos de dos horas de partido. El oriundo de Chascomús, 67° en el escalafón de la ATP, derrotó al juvenil israelí Bar Botzer (776) por 6-2, 6-3 y 6-0 y sentenció la ajustada serie en un irreversible 3-2 en favor del conjunto del ahora saliente Jaite.
“Estoy muy feliz, emocionado, no
tengo palabras de agradecimiento para todo el equipo. Era una mochila pesada y
dimos la vida, hicimos un esfuerzo increíble. Yo tenía toda la presión. Para
ser sincero, tenía miedo y no lo quería arruinar todo”, confesó Berlocq luego
de concretar el triunfo que salvó a la Argentina del descenso.
Así, “El que no salta se va a la B” y “La Promoción se va a la p... que lo parió” se transformaron en los hits de ese atardecer en Sunrise. No obstante, la Asociación Argentina de Tenis ahora debe definir un par de cuestiones importantes: quién será en nuevo capitán y, dependiendo en buena parte de esa designación, si Del Potro volverá a integrar el equipo. A barajar y repartir de nuevo. Volver a empezar. (Fuente La Razón).
Así, “El que no salta se va a la B” y “La Promoción se va a la p... que lo parió” se transformaron en los hits de ese atardecer en Sunrise. No obstante, la Asociación Argentina de Tenis ahora debe definir un par de cuestiones importantes: quién será en nuevo capitán y, dependiendo en buena parte de esa designación, si Del Potro volverá a integrar el equipo. A barajar y repartir de nuevo. Volver a empezar. (Fuente La Razón).
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