Tuvo la despedida que se merecía.
Emocionado hasta las lágrimas y con el aplauso de “su” público, el “Rey David”
Nalbandian se fue del tenis. Después de tantas batallas “heroicas” luchadas
dijo basta.
Y se
dio el lujo de irse ante nada menos que el número uno del mundo, Rafael Nadal,
jugando dos partidos de exhibición. En ambos se lo notó distendido y feliz.
Siempre con una sonrisa en el rostro. El público, ese que lo acompañó en tantos
partidos de Copa Davis, al grito de “olé, olé, olé, David, David…”, no era para
menos. Y alguno que se atrevió a gritarle desde la tribuna: “Gracias por tanta
magia”. Tanto que ganó 11 torneos de ATP, llegó a las semifinales de los cuatro
de Grand Slam y ganó muchos partidos por Argentina en la Davis. Pero nunca pudo
alzarse con la “Ensaladera de Plata”.
El
match final tuvo un “personaje” de lujo: El serbio Novak Djokovic, ex número
uno y sus ocurrencias. Hasta se “disfrazó” de médico para atender a Nalbandian
después de varios peloteos con Rafa. Risas para todos. Hasta se dio
el lujo de jugar un dobles junto a su compañero Pico Mónaco, ese que lo
“acompañó” en tantos juegos de la Davis. Para que no le quedara nada por
disfrutar.
“Estoy
muy feliz de estar en la fiesta de despedida de un amigo que me dio el tenis
como lo es David. Sin dudas, estuvo entre los mejores”, dijo Nadal. “Es un gran
placer poder estar para despedirlo. Cuando empecé mi carrera, él era un top ten
y me habló bastante. Por eso es que decidí venir para estar en esta fiesta que
es su despedida”, contó Nole.
Las
lágrimas de David tienen un justificativo: la ovación de la gente. “Es muy
importante despedirme ante el público que me dio tantas alegrías, que me alentó
en todo momento, sufrió conmigo. Es algo increíble el afecto de ellos que me
apoyaron en toda mi carrera”, sostuvo Nalbandian. “Le agradezco a Pico, Nole y
Rafa por lo excelentes personas y campeones que son”, subrayó y agregó: “Mi
familia hizo un esfuerzo muy grande para que yo fuera tenista y se los
agradezco. Sin ellos no hubiera sido nada”. Sin más, gracias por todo David.
(Fuente Crónica).