Mónica López soporta las críticas de su pase al oficialismo. |
La angustia se percibía desde las primeras frases e hizo
eclosión rápidamente; a Mónica López le cuesta digerir los múltiples ataques
que recibió por saltar del massismo al sciolismo a tres semanas de la elección,
a pesar de que figuraba en la boleta de UNA como candidata al Parlasur.
"No maté a nadie... se interpreta la traición como
si fuera desmembrar a alguien", alcanzó a pronunciar la legisladora
provincial, mientras comenzaba a lagrimear por un vapuleo público y mediático
que considera injusto al menos exagerado.
"Yo reflexioné sobre un grupo de compañeros que quiere un país distinto, pero bueno, son reglas de juego. Cada uno de nosotros busca un lugar donde se siente mejor", explicó.
Para relativizar su cambio de postura, la dirigente
recordó: "Siempre dije que en un ballotage entre Macri y Scioli, iba a
votar a Scioli"; de inmediato reveló que el acercamiento fue paulatino: "Hablé con el gobernador, con Mariotto, dijimos por qué no hacemos el
traspaso de muchísimos compañeros que no están tan en oposición con el
oficialismo y quieren preservar las cosas buenas... y así se dio".
En cuanto a su "borocotización", la ex
representante del massismo aclaró: "Yo me fui antes de asumir una banca,
no después".
Finalmente, López señaló que también la empujaron a tomar la decisión que generó un sacudón sobre el epílogo de la semana pasada: "A mí me han tirado por la ventana, me enteré por la televisión de que no era candidata a gobernadora. Me parece que el espacio en el que estaba se acercaba más a la derecha que al peronismo", finalizó. (Fuente Infobae).
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