Viviana junto a sus alumnos de La Doga. |
En los tiempos que corren,
las dificultades de la gente humilde se hacen cada vez más notorias. En Godoy
Cruz, Mendoza, hay una escuela de boxeo -La Doga- que además del deporte funciona como
contención social de los más expuestos.
Viviana Corzo es la que
lleva la iniciativa desde hace más de un año y asegura que, desde que comenzó, se han reducido los hechos de violencia en la zona.
"Veía que muchos
chicos se juntaban en las esquinas y caían en malos hábitos. Yo tomé la
decisión junto a las autoridades y hoy ya no tantos pibes en las calles, los trajimos
al gimnasio y les inculcamos la importancia de superarse a sí mismos",
comentó Viviana.
El emprendimiento cuenta
con asistencia psicológica y médica, además de talleres educativos para
incentivar el estudios y aprendizaje de oficios. "Le damos las herramienta
para que ellos puedan defenderse en la vida, no a los golpes sino para el
trabajo y que salgan de la calle", explicó la instructora.
"Les inculcamos los
valores que tienen el estudio y el empleo", recalcó. Y agregó: "Todo
esto sirve para destacar el sacrificio, la concentración y el respeto. Los
puños solo se usan en el ring bajo reglas y no en la vida". (Fuente
Crónica).
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